Vecina a la que le robaron la gata y ofrece $ 200.000 para que se la devuelvan
Luna desapareció el del lunes 1 de abril en López y Planes entre Rivadavia y Belgrano de Trelew. La dueña, Alicia, reveló que el captor quedó filmado en las cámaras de seguridad. Ahora ofrece una recompensa para recuperarla
Luuna, una gata siamesa, es un integrante más de la familia de Alicia Lucero y especialmente de su madre, que vive intranquila. Hace más de quince días que la están buscando por toda la zona sur de Trelew. Si bien dieron con varias siamesas similares, ninguna es ella. Ahora, ofrecen una recompensa de 200.000 pesos para que se la devuelvan.
"Hay gente que no entiende cuando se lleva un animal que se lleva un pedacito de vida de alguien", dijo Alicia afligida en diálogo con Jornada.
Lo insólito este caso es que, revisando las cámaras de seguridad, Alicia descubrió el momento preciso en que un adulto con una menor, se lleva a la gata de la puerta de la casa y desaparece en un auto.
El lunes feriado 1° de abril, Alicia y su madre estaban haciendo sus quehaceres, la mujer mayor sufrió un percance y la gata, que solía posar en la ventana, se esfumó. La desaparición se produjo entre las 14 y las 18 horas a plena luz del día.
Ese lunes a la tarde, frente a la casa, en un pelotero, había una larga fila de autos estacionados. "Cuando la gente va saliendo (del pelotero) se ve una silueta de un adulto y una menor que agarran el gato y lo meten en un auto", contó Alicia preocupada.
La mujer, por estas horas, se intenta dar con las personas que pudieron haber estado en esa fiesta de cumpleaños para poder dar con el animal. "Tengo que ir a hablar con los invitados y decirles que me devuelvan el gato", dijo indignada.
Luna no es una gata más; es una siamesa poco más grande que un caniche y tiene la particularidad que es bizca. La gata no está acostumbrada a andar en la calle, sino que vivía encerrada en la casa con ellas por lo que es un animal frágil si no está en su ámbito.
"La plata se la doy igual, no queremos que la tiren porque es torpe, afuera la agarra un perro y la mata. Es una gata de cama, la bañan una vez por semana, no sabe subir a un árbol ni conoce la calle", suplicó Alicia a aquella persona que la tenga que tome los recaudos y la regrese con su dueña.
La madre de Alicia, que es la verdadera dueña de la gata, la extraña todos los días y sale a buscarla cada vez que puede.
Lo indignante de esta historia es no solo el robo del animal, que tenía collar, sino que el daño que su ausencia provoca en los seres queridos.
Por eso la familia está dispuesta a pagar 200.000 pesos a sus captores para que la regresen y se compren otra gata, si es que tanto quieren tener una mascota.
Diario Jornada