Por el choque fatal en la Patagonia que se cobró la vida de una madre y su hija, la Policía busca dar con el vehículo que habría causado la tragedia

Los primeros datos y testimonios que relevó la Policía tras la tragedia que se cobró la vida de una madre y su hija en la Ruta 7, a la altura del kilómetro 76 en la zona de Tratayén, a unos 23 kilómetros de Añelo, sirvieron para que haya un poco de claridad sobre la maniobra fatal.

Las víctimas fueron Gladys Inés Pelatay (63) y Valeria Haydee Espinosa (35), ambas de Rincón de los Sauces. Viajaban en un Toyota Etios que fue impactado por una Toyota Hilux de una empresa petrolera.

La dinámica del choque frontal

El tránsito diario al corazón de Vaca Muerta es incesante. La ruta 7 colapsa todas las mañanas entre las 5 y las 8. Incluso, hay radares que establecen que la velocidad permitida es de 60 km/h y quien viola el límite es multado.

Las empresas que operan en la zona son muy estrictas con sus choferes y los vehículos poseen tacómetros para controlar la velocidad y seguimiento satelital para establecer en que zona se viola un límite.

No obstante, en la zona del accidente, el límite es de 60 km/h, hay cámaras y radares. Entonces, ¿cómo ocurrió el accidente?

El comisario Cristian Cona informó a LMNeuquén que el siniestro ocurrió alrededor de las 9:20 del viernes, en inmediaciones del kilómetro 76, y tras ello, se recibió un llamado solicitando asistencia. En el lugar, los efectivos de Comisaría 10 y la División Tránsito se encontraron con el escenario de un choque frontal entre un Toyota Etios -perteneciente a un particular- y una camioneta Toyota Hilux de una empresa privada.

"En el vehículo particular se trasladaban cuatro personas, con un hombre al volante, acompañado de otro hombre y dos mujeres, las cuales fallecieron en el acto", informó el comisario.

El accidente habría sido producto de una maniobra abrupta e inesperada que provocó un efecto dominó con final de tragedia.

Es que según lo que se pudo reconstruir en base a los testimonios de los conductores, todo se habría iniciado con "la maniobra brusca de un vehículo que intenta acceder a un yacimiento".

A raíz de esto, el conductor de un camión que iba detrás de éste se vio obligado a frenar, también de manera brusca para no impactarlo.

En tanto, el conductor de la camioneta Hilux corporativa, que se encontraba justo detrás de ese camión, invadió el carril contrario, previendo que no alcanzaría a frenar a tiempo sin impactar al vehículo mayor.

"Intenta rebasarlo para no chocar al camión y se topa con el Etios que venía por el carril contrario", detalló Cona. Allí se produjo el impacto frontal.

En la ruta, solo se observó la frenada del camión que evitó al vehículo que ingresó al yacimiento. Es decir, que la Hilux y el Etios chocaron de frente como venían y sin frenar. No hubo tiempo para los integrantes del auto a nada, ni a tensar el cuerpo esperando el impacto.

El impacto y la energía

Cuestiones técnicas. A una velocidad de 60 km/h, un choque frontal puede tener consecuencias devastadoras, especialmente cuando intervienen vehículos con diferencias significativas de peso y tamaño, como en este caso.

Si bien no parece una velocidad extremadamente alta, el impacto combinado entre dos vehículos que chocan de frente genera una energía considerable. Este fenómeno se debe a que la fuerza del choque se duplica, incrementando el daño en ambos vehículos.

En este caso, el Toyota Etios es más liviano y menos robusto, la camioneta Toyota Hilux está diseñada para resistir impactos debido a su estructura más pesada y la lógica de su uso. Esta diferencia de peso puso al Etios en clara desventaja.

El impacto frontal entre ambos vehículos concentró la energía en las partes delanteras, pero el Etios, al ser más liviano, no pudo absorber esta energía de manera eficiente. En colisiones como ésta, la estructura del vehículo más pequeño tiende a deformarse más, y la energía se transfiere hacia los ocupantes, provocando las lesiones fatales que sufrieron madre e hija.

Ahora, la fiscalía aguarda el resultado de la autopsia para establecer las causas de las muertes y en paralelo los peritos preparan los informes de rigor donde se brindarán todos los detalles del siniestro, incluida la velocidad a la que se produjo el impacto.

Por su parte, la Policía revisa cámaras de seguridad para ubicar al vehículo que provocó el efecto dominó.

(LMNeuquén)