Dos pueblos de la Patagonia compiten por ser los mejores del mundo

Son ocho los pueblitos argentinos que compliten en el «Best Tourism Village», una iniciativa de la ONU Turismo que busca promover y reconocer comunidades rurales que implementan prácticas sostenibles y ofrecen experiencias turísticas únicas. Dos son de la Patagonia

Este programa destaca la importancia de preservar la cultura local, el patrimonio y el medio ambiente, al tiempo que impulsa el desarrollo económico en estas regiones. Los ganadores de ediciones anteiores fueron Caspalá, Jujuy en el 2021 y La Carolina, San Luis en el 2023.

Los requisitos que tuvieron que seguir desde la Subsecretaría de Turismo de la Nación para postular a los aspirantes fueron los siguientes: que no superen los 15.000 habitantes; que en él se realicen actividades como la agricultura, ganadería o pesca; que exista una noción de comunidad en los valores y en el estilo de vida de la población.

Los resultados de la selección se conocerían a mediados de noviembre. Los pueblos argentinos que han sido reconocidos en este programa por su compromiso con la sostenibilidad y su rica herencia cultural son los siguientes:

1. Gaiman (Chubut)

Gaiman es un encantador pueblo galés ubicado en la provincia de Chubut. Fundado por inmigrantes galeses en el siglo XIX, Gaiman ofrece a los visitantes la oportunidad de disfrutar de su arquitectura de estilo colonial y de experimentar la calidez de su comunidad. Los turistas pueden participar en actividades como paseos en bicicleta, caminatas por senderos naturales y degustaciones de su famosa repostería galesa, que incluye tortas de frutas y panes típicos.

2. Caviahue-Copahue (Neuquén)

Caviahue-Copahue es un destino turístico ubicado en la provincia de Neuquén, conocido por sus impresionantes paisajes montañosos y sus aguas termales. Este pueblo, situado a orillas del lago Caviahue, es famoso por su centro de esquí en invierno y sus actividades al aire libre durante el verano, que incluyen senderismo, pesca y avistamiento de flora y fauna autóctona.

3. Los Chacayes (Mendoza)

Los Chacayes es una pequeña localidad en la provincia de Mendoza, situada en un entorno de montañas y viñedos. Este pueblo es reconocido por su producción de vinos de alta calidad, destacándose especialmente por sus varietales de Malbec. Los visitantes pueden explorar bodegas familiares, participar en degustaciones y aprender sobre el proceso de vinificación, todo en un ambiente auténtico y acogedor.

4. Campo Ramón (Misiones)

Campo Ramón es un pintoresco pueblo en la provincia de Misiones, rodeado por la exuberante selva misionera y conocido por su rica biodiversidad. Esta localidad se presenta como un destino ideal para quienes buscan el ecoturismo, ofreciendo actividades como senderismo, observación de aves y visitas a reservas naturales. La conexión con la naturaleza es profunda, y los visitantes pueden disfrutar de la belleza de sus paisajes mientras aprenden sobre la flora y fauna autóctona.

5. Villa Tulumba (Córdoba)

Villa Tulumba es un encantador pueblo en la provincia de Córdoba, conocido por su rica historia y arquitectura colonial. Fundado en el siglo XVII, este pueblo es famoso por su iglesia de San Francisco y su bien conservado casco histórico. Sus calles empedradas invitan a los visitantes a explorar y descubrir la historia que se respira en cada rincón.

6. Urdinarrain, Entre Ríos

Urdinarrain es un encantador pueblo ubicado en la provincia de Entre Ríos, caracterizado por su aura apacible y su rica tradición agrícola. Fundado a finales del siglo XIX, tiene una arquitectura sencilla y amplios espacios verdes.

7. Saldungaray, Buenos Aires

Saldungaray, ubicado en el partido de Tornquist, se destaca por su arquitectura, historia y cercanía a atractivos naturales como el Parque Nacional Sierra de la Ventana. Fundado a principios del siglo XX, alberga sitios emblemáticos como el Cementerio, diseñado por el arquitecto Francisco Salamone en la década de 1930, que fusiona art decó, elementos futuristas y simbología religiosa.

8. Barrancas, Jujuy

Barrancas es un punto de partida para explorar la biodiversidad y la historia de Jujuy, con tradiciones que reflejan la herencia indígena y colonial. Su cercanía a atracciones naturales y culturales hace de Barrancas un lugar para disfrutar de la autenticidad del noroeste argentino.