Por decreto, Milei transformó al Banco Nación en una sociedad anónima
La medida fue oficializada a través del DNU 116/2025, publicado este jueves en el Boletín Oficial.
El presidente Javier Milei firmó un decreto de necesidad y urgencia (DNU) que convierte al Banco de la Nación Argentina (BNA) en una sociedad anónima. La medida fue oficializada a través del DNU 116/2025, publicado este jueves en el Boletín Oficial, minutos después de que el vocero presidencial, Manuel Adorni, la anunciara en su cuenta de X.
Objetivo y alcances de la transformación
El decreto establece que el banco pasará a denominarse Banco de la Nación Argentina Sociedad Anónima (BNA S.A.), manteniendo el Estado Nacional el control del 99,9 % de las acciones, mientras que la Fundación Banco de la Nación Argentina poseerá el 0,1 % restante. Según el documento oficial, la transformación busca modernizar la estructura operativa del banco, alineándolo con estándares internacionales de gobierno corporativo, y mejorar su competitividad en el sector financiero.
Desde el Gobierno sostienen que esta medida permitirá optimizar la asignación de recursos, fortalecer la posición del banco en el mercado y garantizar la continuidad de su operatividad. Además, se enmarca en el Decreto 70/2023, que estableció la transformación de sociedades estatales en sociedades anónimas, y en la Ley 27.742, que delegó facultades al Poder Ejecutivo para reorganizar estructuras estatales con el objetivo de mejorar la eficiencia del gasto público.
El camino hacia la conversión
La iniciativa, que había quedado fuera de la ley ómnibus, fue impulsada desde hace meses por los directivos del Banco Nación, liderados por su presidente, Daniel Tillard, y su vice, Darío Wasserman. Luego de cerrar el balance del 2024, la entidad avanzó con la transformación, justificándola en la necesidad de mejorar su capacidad crediticia y su fondeo para ampliar los préstamos a pequeñas y medianas empresas y familias.
Según datos de la propia entidad, al 31 de diciembre de 2024, el banco registró activos por $48 billones, con un patrimonio neto de $15 billones y una cartera de préstamos de $15 billones. La nueva configuración permitiría una mayor flexibilidad para captar capital sin que ello implique necesariamente su privatización.
Rechazo gremial y polémica política
Distintos gremios bancarios manifestaron su oposición a la conversión en S.A., argumentando que el rol social del banco podría verse afectado. Desde estas entidades sostienen que el BNA cumple una función de asistencia financiera que no puede ser reemplazada por bancos privados, cuyo único objetivo es la rentabilidad.
En el ámbito legislativo, durante el debate de la Ley de Bases en 2024, el Congreso había decidido excluir al BNA de la lista de empresas estatales a privatizar, lo que refleja la resistencia política a la medida. Pese a ello, la presidencia del banco avanzó con la transformación bajo el amparo de las facultades delegadas por el Ejecutivo.
Con la publicación del decreto, el Banco Nación inicia una nueva etapa como sociedad anónima, en medio de un fuerte debate sobre el futuro de las empresas estatales en Argentina.(La Gaceta)