En medio de la privatización de trenes, el Gobierno de Milei busca disolver Ferrocarriles Argentinos
Quien se haría cargo de la empresa es una sociedad que coordina las empresas ferroviarias. "La idea es que deje de existir y que estas reporten directamente a la secretaría de Transporte".
El gobierno de Javier Milei ya comenzó con el trabajo de disolución de Ferrocarriles Argentinos. Luego de la privatización de la línea Belgrano Cargas, el Gobierno avanza con un nuevo paso en la reestructuración ferroviaria y estudia la disolución de Ferrocarriles Argentinos Sociedad del Estado (FASE).
Esta entidad, que depende de la Subsecretaría de Transporte Ferroviario liderada por Martín Ferreiro, coordina actualmente diversas empresas ferroviarias del país.
Según declaraciones de un funcionario a TN, FASE representa una estructura jerárquica que podría ser eliminada para simplificar la organización del sistema ferroviario: "FASE no tiene razón de ser, es la estructura jerárquica que está por encima de las empresas de trenes. La idea es que deje de existir y que las empresas reporten directamente a la Secretaría de Transporte.
No debería haber nada en el medio". La eliminación de FASE permitiría que las empresas ferroviarias operen bajo la dirección directa de la Secretaría de Transporte, prescindiendo de la estructura intermedia que actualmente representa.
FASE, presidida por Federico Canedi, coordina la Sociedad Operadora Ferroviaria S.E. (SOFSE), la Administración de Infraestructuras Ferroviarias S.E. (ADIFSE) y, hasta hace poco, a Belgrano Cargas. Asimismo, absorbió a los 1.300 empleados de Trenes Argentinos Capital Humano, disuelta previamente por el secretario de Transporte, Franco Mogetta.
Esta entidad fue creada en 2015 mediante la ley 27.132 con el objetivo de revitalizar el sistema ferroviario de cargas y pasajeros y mejorar su infraestructura. Su estructura incluye un directorio con representantes de Transporte, los presidentes de las empresas coordinadas, representantes sindicales y un delegado de usuarios.
A nivel operativo, FASE cuenta con una secretaría general, una unidad de Auditoría Interna y seis gerencias, además de 11 subgerencias que supervisan funciones desde administración y finanzas hasta innovación. Para el 2024, el presupuesto proyectado asignado por la Secretaría de Hacienda, encabezada por Carlos Guberman, incluye $7124 millones en transferencias del Tesoro Nacional, de los cuales $4.000 millones son destinados a salarios y $2.205 millones para bienes y servicios.
Dentro de sus gastos internos, FASE prevé costos como $29.8 millones en alquiler de impresoras, $61.6 millones para seguridad privada, $48.4 millones para mantenimiento, $10 millones para combustible y $4.5 millones para suministro de agua, entre otros
La posible disolución de FASE se inscribe en el plan de concesión de los tramos de la línea Belgrano Cargas, que abarca una extensión de 7.600 kilómetros y emplea a 4.442 trabajadores. Además, el Gobierno evalúa privatizar SOFSE, otra entidad ferroviaria bajo la órbita de FASE, la cual cuenta con un total de 23.271 empleados.
Fuente: El Zonda