¿Dónde está Loan? La causa avanza, pero la incertidumbre crece

La causa por la desaparición de Loan Danilo Peña, el niño de cinco años que fue visto por última vez en el paraje El Algarrobal, Corrientes, volvió a quedar en el centro de la atención pública. Esta semana, la Cámara Federal de Corrientes ratificó la prisión preventiva de los siete imputados, pero lo cierto es que el niño sigue sin aparecer y el caso parece alejarse, cada vez más, de una resolución clara.

Los acusados -Bernardino Benítez, Laudelina Peña, María Victoria Caillava, el ex marino Carlos Pérez, Mónica Millapi, Daniel "Fierrito" Ramírez y el ex comisario Walter Maciel- continúan detenidos, pero con modificaciones en algunas de las imputaciones. Por ejemplo, a Caillava se le quitó el cargo de amenazas y a Maciel se le cambió la figura de encubrimiento agravado por la de partícipe necesario en la sustracción del menor.

A pesar de la firmeza en los procesamientos, la Cámara expresó críticas al enfoque de la jueza Pozzer Penzo, quien instruyó la causa desde Goya. En particular, se puso en duda la hipótesis de un posible accidente previo a la desaparición del niño, un giro que agrega más incertidumbre al relato oficial de los hechos.

¿Qué pasó realmente con Loan?
A medida que la causa avanza hacia una posible instancia de juicio oral, las preguntas se multiplican. ¿Fue realmente un plan premeditado para secuestrar a Loan durante un almuerzo familiar? ¿Todos los involucrados tuvieron el mismo grado de participación? ¿Por qué, tras tantos meses, no hay una sola pista certera sobre el paradero del niño?

La reconstrucción judicial sostiene que hubo roles definidos entre los imputados: desde quienes debían atraer al niño hacia el naranjal, hasta quienes facilitarían su traslado, presuntamente con apoyo institucional. La figura del ex comisario Maciel, señalado como quien debía "limpiar el camino", refuerza las sospechas de una red más amplia.

Sin embargo, la ausencia de resultados concretos alimenta el desconcierto, tanto entre los investigadores como en la sociedad. La Cámara lo dejó claro: más allá de las dudas en torno al relato de lo sucedido, el hecho central -la desaparición de un menor- persiste, sin explicación ni resolución.

Una comunidad que no olvida
Mientras la causa avanza por los carriles judiciales, el dolor y la angustia siguen presentes en la comunidad. La figura de Loan, su imagen sonriente en carteles y redes sociales, continúa siendo símbolo de una verdad que aún no llega. Las familias, las organizaciones y muchos ciudadanos insisten: "Queremos saber qué pasó con Loan".

El tiempo corre y el juicio se aproxima. Pero la pregunta esencial sigue sin respuesta: ¿dónde está Loan?