Regresó a Santa Cruz y descubrió un secreto en el mar patagónico

Se trata de Gisela Busaniche, periodista premiada, criada en Santa Cruz, que bajo el lema (y el hashtag) #turistaenmitierra regresó para recorrer las costas de la provincia, y descubrió el mar de Monte León, joya del turismo azul de Santa Cruz y un lugar que además, había visitado antes de nacer.

"Santa Cruz es mi tierra, me crie en Río Gallegos y allí tengo mis raíces. Crecí en la Patagonia y me siento con una personalidad muy patagónica: creo que, quien es de aquí, se forja fuerte, no se derrumba fácil, lucha." "Quién puede vivir con temperaturas muy bajas, sin tanto sol y con mucho viento, puede vivir en cualquier lado" agrega Gisela sobre las condiciones extremas de la región patagónica.

Cómo muchas de su generación, la historia familiar de los Busaniche se vio marcada por la persecución política de la última dictadura militar. Sus padres -militantes peronistas- debieron dejar Rosario, de donde son oriundos, y migrar al sur: "Fueron de los miles de argentinos que hicieron el exilio interno. Llegaron a Santa Cruz en octubre de 1976, con mi mamá embarazada de mí. Mi viejo se fue a trabajar con su primo en la construcción de casas en Puerto Santa Cruz. Así que ahí llegue en la panza."

Gisela agrega que, por apenas unos días, sus padres viajaron a Rosario para su nacimiento, y pronto regresaron a Santa Cruz. Lo cierto es que el espíritu patagónico, esa forma de ser tan única de quienes habitan la región austral de nuestro país, no es algo que se pueda adquirir, pero tampoco que requiera de papeles. "Me bautizaron en el pueblo de mi mamá un 1.º de mayo y volvimos. Yo viví en Santa Cruz los primeros añitos, y después nos mudamos a Gallegos. A la calle Villarino, frente al Barrio de YPF, cerca de la ría."

De aquel tiempo hasta ahora, muchas cosas han cambiado. "No estaba todo construido, la ría estaba más cerca y yo iba siempre en bicicleta. Jugaba con lo poco que había, no eran tiempos de grandes consumos. Y así me crie. Mitad en casa, mitad en la calle yendo y viniendo a pesar del viento. Fue muy libre y despeinada en mi niñez y adolescencia, y todavía sigo diciendo que si estoy despeinada es por el viento" dice entre risas y agrega "o a lo Mafalda: no estoy despeinada, es que mi pelo tiene libertad de expresión."

Y con esa misma libertad que le impulsa el viento desde su infancia, Gisela regresó a Santa Cruz. Visitó la casa de sus padres en Río Gallegos, y recorrió por primera vez ese lugar en el que había estado antes de nacer y nunca después, hasta ahora. Se trata de la imponente costa del Parque Nacional Monte León. Allí donde la estepa patagónica se encuentra con el mar, Gisela se encontró con un mar de recuerdos.

"Cuando les cuento a mis padres que estaba yendo a Monte León, mi vieja me dice: vos ya estuviste ahí, cuando estaba embarazada de vos fuimos a conocerlo con tus abuelos." De aquellas épocas los Busaniche no solo guardaron el recuerdo, sino también las fotos, algunas de las cuales pueden verse en los reels que la periodista publicó en redes, visitando los mismos puntos que sus padres y abuelos habían recorrido 46 años atrás. "Mi viejo me trajo fotos en blanco y negro de mi abuelo Hector Busaniche. Siluetas de mi mamá embarazada de mí y sus amigos. Fotos de la olla de Monte León, que se derrumbó hace unos años. Fotos en blanco y negro de paisajes inmensos y una costa salvaje que me emocionó mucho."

46 años después, esa costa salvaje, continúa salvaje. En el año 2004 fue creado el Parque Nacional Monte León "el primer Parque Nacional creado mirando el mar" según ha dicho su intendenta, Mariela Gauna, en otras entrevistas. Sin embargo, ese parque que mira al mar, no lo protege. En octubre de 2023 el gobierno de Santa Cruz junto a la Administración de Parques Nacionales (APN) firmaron un convenio para la creación del área marina protegida, ubicada, precisamente, frente al Parque Nacional Monte León.

Toda la riqueza que habita la costa, da fama al lugar, y transforma el paisaje, depende de un mar que se encuentra a su suerte, a menos que se sancionen las leyes que ratifican el acuerdo, según explica la periodista: "solo falta que pase por Legislatura y espero y les pido a los legisladores santacruceños que tengan en cuenta este tema y lo traten pronto." dice Gisela. Se refiere al paso siguiente que requiere que el acuerdo sea ratificado por las legislaturas de ambas jurisdicciones y de esta manera, "se salde la deuda" de casi 20 años que quedó pendiente con la creación del Parque Nacional Monte León, para que esa costa, cuya vida depende del mar, sea siempre salvaje.

Aves marinas como petreles y pingüinos de magallanes, pulpos y lobos marinos son solo algunos de los animales que pueden verse al llegar a la playa. Los inmensos acantilados, y la playa, con sus restingas que aparecen al bajar la marea, son hogar de una increíble biodiversidad, por eso, llegando a la costa de Monte León, la quietud de la estepa va quedando atrás y hacia delante el paisaje se llena de vida. Una vida que invita al turista a conocer, a aventurarse y a descubrir que hay donde termina la estepa. Que así como convocó a los padres y abuelos de la periodista 46 años atrás, la convocó a ella a volver como turista en su tierra.

"Me sorprendieron los acantilados, los cormoranes y lobos marinos que no sabía que estaban tan cerca. Me encantó caminar descalza y sentir la arena y el sol que nos acompañó, haciéndonos la convivencia con el viento más fácil." Cuenta Gisela acerca de su experiencia en Monte León y agrega: "Fui junto a Martina Sasso, una de las directoras de Por el Mar y junto a un gran equipo muy comprometido con nuestra provincia."

Se refiere a que la Fundación Por el Mar, una organización dedicada a la conservación marina, trabaja junto a las comunidades locales para proteger los ecosistemas marinos de la región. En el mar de Monte León, han realizado varias expediciones científicas a fin de registrar y preservar el poco conocido ambiente marino del lugar, y a partir de convenios con la Administración de Parques Nacionales, y el Gobierno Provincial, se encuentra construyendo un camping para impulsar el turismo que llega a descubrir la vida marina, en la costa del parque, con el principio de que "para proteger primero hay que conocer".

Al respecto, Busaniche reflexiona: "Me doy cuenta de que me crie al lado del mar y no sé mucho de Él. Literal, yo vivía cerca de la ría y no estaba construido, así que desde calle Sureda subía a la bici y ya estaba ahí. No sabía que en nuestras costas hay centolla. No sabía que había lobos marinos tan cerca. No sabía que teníamos tanta riqueza tan cerca." Sus palabras, sin embargo, representan una realidad para muchos, una realidad que ahora busca transformar compartiendo su experiencia, y consultada acerca de qué fue lo que más la sorprendió durante la visita, responde: "Lo que no conocía y lo que me llamó la atención fueron los bosques de macroalgas. No sabía de su existencia ni su importancia." De estos bosques sumergidos y del mar depende la vida que transforma la costa de Monte León en un paisaje digno de ser visto.

Respecto de los aprendizajes que se llevó de Monte León, Gisela relata sus charlas con el personal del parque. "Me explicaron todo con mucha pasión y compromiso. Hay algo de patria en cuidar esos lugares inhóspitos donde el clima a veces es adverso. Y verlos y escucharlos con tanto amor por nuestra tierra santacruceña me emocionó. Las lágrimas de Lara cuando le pregunté qué era lo que más le gustaba del parque y me dijo que su lugar favorito es caminar por la costa en marea baja y contemplar la inmensidad. Y el deseo de Carlos de que termine todo el papelerío para que sea protegido nuestro mar y nuestros bosques de algas." Se refiere a la creación del Parque Interjurisdiccional Marino Monte León que debe ser ratificada.

Consultada acerca de por qué le parece importante proteger el mar en Monte León, Gisela responde: "Protegiendo podemos generar un valor agregado que de nuevas divisas a nuestra provincia gracias al turismo." Esta visión, según cuenta, la interpela directamente, como santacruceña y como argentina. "Recuerdo que en Puerto Santa Cruz frenó el viento y pude recorrer su costa, y sentarme en el banquito homenaje a Saint Exupéry. Y pensé que todos tenemos algo de El Principito en lo soñador que era. Sueño con un Puerto Santa Cruz y Piedra Buena que vea a Monte León como destino turístico." Y concluye: "Se puede desarrollar nuestro mar y la ruta 3 desde lo turístico. Cada vez son más los argentinos y argentinas que agarran el auto para recorrer el país. La Patagonia sin duda es un destino soñado. Distinto. Así, Santa Cruz tendría su ruta cordillerana, que es un éxito, y su ruta costera, que será un éxito."

La periodista documentó y publicó su viaje bajo el hashtag #turistaenmitierra en la red social Instagram, donde compartió increíbles imágenes del mar santacruceño.