MENOR AL VOLANTE

Licencia de conducir antes de los 18 años en Santa Cruz: los trámites, autorizaciones y responsabilidades legales

La Dra. Bárbara De Cristófaro, presidenta del Colegio de Escribanos de Santa Cruz, brindó detalles sobre los requisitos para que menores de edad puedan conducir en Argentina.

Redacción Nuevo Día
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En Argentina, los menores de 18 años pueden obtener un carnet de conducir bajo ciertas condiciones y con la autorización expresa de sus padres o tutores. La Dra. Bárbara De Cristófaro, presidenta del Colegio de Escribanos, explicó los detalles de este procedimiento, regulado principalmente por la ley nacional de tránsito 24.449 y complementado por normativas locales según la jurisdicción.

De Cristófaro destacó que la normativa nacional permite que menores de entre 16 y 17 años puedan manejar determinados vehículos, pero siempre con el respaldo legal de sus padres. "Por ejemplo, los ciclomotores o motovehículos pueden conducirse a partir de los 16 años en la mayoría de las jurisdicciones, aunque algunos municipios permiten esta práctica desde los 15", señaló en diálogo con Radio Nuevo Día.

En cuanto a los automóviles, los menores de 17 años pueden solicitar el carnet de conducir anticipado con autorización parental. "La ley 24.449, en sus artículos 11 y 17, habilita esta posibilidad, siempre y cuando los padres o tutores expresen su consentimiento. Este trámite puede realizarse en tránsito o, en caso de no poder hacerlo personalmente, mediante un acta en una escribanía", explicó la escribana.

De Cristófaro subrayó la importancia de este consentimiento: "Tiene que ser una autorización expresa, y es fundamental destacar que puede ser revocada en cualquier momento a simple solicitud de los padres o tutores. Si un adulto considera que el adolescente no tiene la conducta o madurez adecuada, puede ejercer este derecho y retirar la autorización."

Además, aclaró que este tipo de permisos es necesario para que los menores puedan completar el trámite y obtener el carnet en las oficinas de tránsito.

Responsabilidad legal de los padres

Más allá de los requisitos administrativos, la Dra. De Cristófaro llamó la atención sobre las responsabilidades que asumen los adultos al otorgar este tipo de permisos. "Cuando un menor maneja, no solo es responsable de su conducta, sino que los padres también pueden verse involucrados legalmente en caso de accidentes", indicó.

En este sentido, la escribana explicó que los tutores deben evaluar cuidadosamente si el adolescente está preparado para conducir. "Un vehículo consume seguridad, y no solo implica un riesgo para quien maneja, sino para toda la comunidad. Por eso, los padres deben analizar el perfil del menor y decidir si cuenta con la madurez necesaria para afrontar esta responsabilidad."

En caso de un accidente de tránsito, los padres podrían enfrentar demandas civiles, sobre todo si el menor no cuenta con un seguro. "El seguro es el primer recurso ante cualquier incidente, pero si no existe o no es suficiente, los damnificados pueden reclamar directamente a los tutores, quienes legalmente son responsables hasta que el menor alcance la mayoría de edad."

De Cristófaro también hizo referencia a la importancia de inculcar en los adolescentes una conducta responsable al volante: "Es un voto de confianza que los padres otorgan, pero así como lo dan, también pueden retirarlo si consideran que el menor no está cumpliendo con las expectativas."

Normativas locales 

La presidenta del Colegio de Escribanos recordó que, aunque la ley nacional establece las bases generales, cada provincia y municipio puede tener regulaciones adicionales. Esto incluye diferencias en las edades mínimas para conducir ciertos vehículos y los requisitos específicos para obtener un carnet anticipado.

"En caso de que los padres no puedan realizar el trámite personalmente en tránsito, siempre está la opción de acercarse a una escribanía. Allí pueden manifestar su voluntad de autorizar al menor, lo cual tiene la misma validez legal. Este documento puede ser presentado luego por el adolescente en las oficinas correspondientes."

Para finalizar, De Cristófaro destacó la importancia de la responsabilidad social y familiar al momento de otorgar estas autorizaciones: "Los padres deben entender que no se trata solo de un trámite administrativo, sino de una decisión que involucra la seguridad de sus hijos y de toda la comunidad. Cada familia tiene la tarea de evaluar si el menor está listo para afrontar este desafío."

La escribana también hizo un llamado a los conductores, tanto adolescentes como adultos, para que respeten las normas de tránsito y conduzcan con responsabilidad: "La seguridad vial depende de todos, y el primer paso es garantizar que quienes están al volante comprendan el impacto de sus acciones."

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