La historia que te va a emocionar: los nonos que eligieron vivir viajando
Jorge Muti y Laura Ross son un matrimonio cordobés que decidió dejar la rutina y lanzarse a la aventura de vivir en un motorhome. Desde hace años recorren Argentina vendiendo artesanías y compartiendo historias. Río Gallegos fue una de sus paradas más queridas. Así lo relataron a Javier Seveso, conductor de Rock and Frío por Radio Nuevo Día.
En un rincón lluvioso de Belville, Córdoba, mientras ceban unos mates, Jorge Muti y Laura Ross recuerdan su viaje por el sur argentino con una sonrisa que atraviesa la línea telefónica.
Se hacen llamar los "nonos bohemios" y, desde hace varios años, eligieron cambiar la rutina por la ruta. Su casa es un motorhome que bautizaron con ternura como "la mascota", y su vida es un mapa desplegado de paisajes, personas y recuerdos que atesoran en cada kilómetro recorrido.
Todo comenzó con una decisión valiente. Jorge, mecánico de oficio, y Laura, cocinera emprendedora, decidieron dejar atrás la vida tradicional. Primero fueron moteros, con carpa al hombro y espíritu libre.
Luego vino la casilla rodante y finalmente el colectivo adaptado que los lleva sin apuro, a 80 km por hora, disfrutando de cada curva del camino.
"Nos gustaba andar, pero llegó un momento en que ya no podíamos dormir tirados en el piso. Entonces dijimos: cambiamos todo", cuenta Laura. Y así lo hicieron. Venden artesanías en cada destino, desde pulseritas hasta piedras naturales que ellos mismos recolectan y trabajan. "Lo que más nos gusta no es la venta, es el vínculo con la gente. Nos han invitado a casas, a estancias, hemos hecho amistades en cada pueblo", dice Jorge.
Una de esas amistades la encontraron en Río Gallegos. Allí pasaron dos semanas, una de ida y otra de regreso, estacionados en la YPF de la Ruta 3. "Luján, una chica que trabaja en la estación, fue tan cálida que nos quedamos más tiempo por ella. Nos orientaba, tomábamos mates, compartimos comidas", recuerdan con cariño. "Si alguien la conoce, que le diga que la recordamos con mucho amor".
Entre risas, anécdotas de tránsito con guanacos y confesiones de pasillo en su hogar rodante de 12 metros cuadrados, los nonos bohemios hablan de la paciencia, el amor y el entendimiento que sostienen esta vida juntos. "La convivencia es intensa, no hay lugar para encerrarse, pero hay diálogo, hay humor y eso salva todo", afirma Laura.
Además de ser viajeros, Jorge y Laura son un mensaje viviente para quienes sueñan con otra forma de vida. "No tomamos más medicación. Ni para la presión, ni para la diabetes. Vivimos sin vencimientos, sin turnos en el banco, sin boletas de luz. Es una vida mejor", afirman sin titubeos.
Hoy se preparan para recorrer el norte argentino y parte de Paraguay, pero saben que lo importante no es el destino, sino el camino. "Hay que tomar coraje", dicen al unísono. "La libertad se siente cuando dejás de correr detrás del reloj y empezás a vivir el ahora".
Así, entre mates, paisajes y corazones abiertos, Jorge y Laura siguen rodando. Y en cada paso, nos invitan a mirar el mundo con otros ojos. (Diario Nuevo Día)