Río Gallegos: denunció violencia laboral, tuvo carpeta psiquiátrica, le dieron el alta, pero no le permiten volver porque trabajan quiénes denunció
La Dra. Mariela Llanos, médica especialista en Terapia Intensiva, denunció violencia laboral en el Hospital Regional de Río Gallegos y cuestionó la negativa de las autoridades para reincorporarla pese a contar con el alta médica. "Solo quiero trabajar, ganarme el sueldo dignamente", indicó.
La Dra. Mariela Llanos, médica cirujana, generalista y formada en Terapia Intensiva en la Sociedad Argentina de Terapia Intensiva (SATI), enfrenta lo que considera un trato injusto y humillante por parte del Hospital Regional de Río Gallegos. En diálogo con El Diario Nuevo Día, detalló las consecuencias que vivió desde que en 2022 denunció a dos colegas por violencia laboral en el área de Terapia Intensiva.
"Hice un descargo y me dijeron que debía formalizar la denuncia, según la directora y la línea jerárquica", explicó Llanos. Como resultado, se activaron los protocolos de violencia de género y la Ley Micaela, pero en lugar de encontrar una solución, fue separada del área en la que estaba formada. "El 4 de octubre de 2022 me notificaron que ya no pertenecía a Terapia y me ofrecieron pasar a médica generalista, una especialidad que tengo, pero que nunca ejercí", detalló.
A comienzos de 2023, bajo recomendación de su abogado, solicitó una licencia sin goce de sueldo y trabajó fuera de la provincia. Al intentar reincorporarse, se encontró con más trabas. "Me pidieron 15 días de tregua, pero luego me enviaron al interior provincial, a Puerto Santa Cruz. Regresé en febrero y no había percibido haberes. No tenía dinero ni para mantener mi matrícula activa, algo que fue vergonzoso", relató.
Entre febrero y junio, su situación se agravó. Llanos asegura que fue se presentaba a marcar diariamente, pero sin tareas asignadas. "No hacía nada. Algunos compañeros me dijeron que era egoísta por insistir en volver a Terapia Intensiva. Fue una experiencia humillante", confesó.
En junio, la médica sufrió un colapso emocional. "Tuve ataques de pánico, estrés postraumático y necesité medicación para poder salir a la calle", reveló.
Sin embargo, tras recibir el alta psiquiátrica el viernes pasado, intentó reincorporarse nuevamente a su puesto en Terapia Intensiva, pero se le negó esa posibilidad. "Me dijeron que no era viable que volviera porque los que denuncié seguían en el área. Es contradictorio, porque dicen que no hay médicos ni profesionales, pero al mismo tiempo no me dejan trabajar", subrayó.
Llanos denunció que le ofrecieron seguir cobrando su sueldo sin realizar tareas habituales, pero rechazó la propuesta. "Me pidieron un plazo para seguir cobrando, pero les dije que no, que no me parece digno. No quiero que me paguen por no trabajar. Quiero ganarme el dinero dignamente, ejerciendo donde estoy formada. Les pedí que prescindieran de mis servicios para poder irme a otra provincia", afirmó.
Pese a su negativa, fue notificada de otro traslado, esta vez al área de Atención Primaria de Salud. "No quiero un puesto inventado. Estoy formada en Terapia Intensiva y quiero trabajar ahí. Esto no es solo por dinero, es una cuestión de dignidad. No quiero que me regalen un sueldo, quiero demostrar mi formación y trabajar honestamente", concluyó.
El caso generó repercusión a nivel gremial, con el Sindicato Médico AMRA Seccional Santa Cruz emitiendo un comunicado en repudio a las decisiones tomadas por el Hospital Regional y el Ministerio de Salud Provincial. En el texto, calificaron la situación como un acto de maltrato y abuso de autoridad en un contexto de crisis sanitaria y déficit de profesionales.
"Negarle la reincorporación a una médica que ya cuenta con el alta médica es irracional e injustificable. Una vez más, los médicos sufren maltrato por parte de las autoridades. En plena crisis sanitaria, es inadmisible que se niegue el derecho a trabajar dignamente a una profesional con experiencia", expresó AMRA.
"Solo quiero trabajar, ganarme el sueldo dignamente", finalizó.