Un fuerte terremoto sacudió Taiwán y emiten alertas de tsunami
Un terremoto de magnitud 7,2 frente a la costa de Taiwán sacudió el miércoles por la mañana la capital Taipéi, cortando el suministro eléctrico en varias partes de la ciudad y provocando una alerta de tsunami para las islas del sur de Japón y Filipinas.
Las estaciones de televisión de Taiwán mostraron imágenes de algunos edificios derrumbados en Hualien, cerca del epicentro del terremoto, y los medios informaron que algunas personas quedaron atrapadas.
El potente sismo se produjo a las 07.58 hora local (2358 GMT) a una profundidad de 15,5 kilómetros justo frente a la costa oriental de Taiwán, según la Administración Meteorológica Central de Taiwán. Fue el terremoto más fuerte que ha azotado la isla en 25 años, dijeron los medios estatales.
Un fuerte terremoto sacudió Taiwán y emiten alertas de tsunami
Japón emitió un aviso de evacuación para las zonas costeras de la prefectura sureña de Okinawa. Se esperaba que olas de tsunami de hasta 3 metros alcanzaran grandes áreas de la costa suroeste de Japón, según la Agencia Meteorológica de Japón, que estimó preliminarmente la magnitud del terremoto en 7,5, pero luego la aumentó a 7,7.
Un tsunami de 30 centímetros llegó a la isla Yonaguni a las 09.18 local (0018 GMT), dijo la agencia meteorológica japonesa.
La Agencia Sismológica de Filipinas también emitió una advertencia para los residentes de las zonas costeras de varias provincias, instándolos a evacuar a terrenos más elevados.
El terremoto se sintió en Shanghái, dijo un testigo de Reuters. Según medios estatales chinos también se sintió en Fuzhou, Xiamen, Quanzhou y Ningde en la provincia china de Fujian.
El gobierno de la ciudad de Taipéi no ha recibido ningún informe de daños y el sistema de metro MRT de la ciudad estuvo en funcionamiento poco después.
El operador ferroviario de alta velocidad de Taiwán dijo que no se reportaron daños ni heridos en sus trenes, pero señaló que los trenes sufrirán retrasos mientras realiza las inspecciones.
El Parque Científico del Sur de Taiwán, donde el gigante de semiconductores Taiwan Semiconductor Manufacturing Co tiene una planta, dijo que las empresas estaban operando sin impacto.
La agencia central de noticias oficial de Taiwán dijo que el terremoto fue el mayor que azotó la isla desde 1999, cuando uno de magnitud 7,6 mató a unas 2.400 personas y destruyó o dañó 50.000 edificios en uno de los peores sismos registrados en Taiwán.
La emisora pública japonesa NHK dijo que el terremoto registró una intensidad de "6 superiores" en Hualien de Taiwán en la escala de intensidad de Japón de 1 a 7.
En un terremoto de magnitud 6, la mayoría de los muros de bloques de concreto no reforzados colapsan y a las personas les resulta imposible permanecer de pie o moverse sin gatear, dice la Agencia Meteorológica de Japón.
Japón emitió un aviso de evacuación para las zonas costeras de la prefectura meridional de Okinawa después de que un fuerte terremoto desencadenara una alerta de tsunami.
Se esperaba que olas de tsunami de hasta 3 metros alcanzaran amplias zonas de la costa suroeste de Japón, según la Agencia Meteorológica del país. La alerta se produjo después de que un seísmo muy superficial de magnitud preliminar 7,5 sacudiera el océano cerca de Taiwán.
Un tsunami de 30 cm alcanzó la isla de Yonaguni a las 09.18 hora local (0018 GMT), según la agencia meteorológica japonesa.
El día de Año Nuevo, Japón se vio sacudido por el sismo más mortífero de los últimos ocho años, cuando un terremoto de magnitud 7,6 sacudió la prefectura de Ishikawa, en la costa occidental. Más de 230 personas murieron tras el movimiento telúrico que destruyó total o parcialmente 44.000 viviendas.
Los terremotos son frecuentes en Japón, una de las zonas con mayor actividad sísmica del mundo. En Japón se produce alrededor de una quinta parte de los sismos de magnitud 6 o superior del mundo.
El 11 de marzo de 2011, la costa noreste fue sacudida por un terremoto de magnitud 9, el más fuerte registrado en Japón, y un tsunami masivo. Aquellos sucesos desencadenaron la peor crisis nuclear del mundo desde Chernóbil, un cuarto de siglo antes.
(Reporte de Rocky Swift, Kantaro Komiya, Kaori Kaneko; Editado en Español por Manuel Farías)