Triste Realidad

Santa Cruz en quiebra, el Gobierno oculta los números y los diputados vuelven a ser "peones"

Difícilmente podría ser peor el panorama en la provincia de Santa Cruz, que está "quebrada" según lo manifestó la gobernadora, aunque todavía no dio detalle alguno de la situación económica, incluso mandando a los diputados como "peones" a evitar una sesión extraordinaria.


22 mil millones de pesos son los que recibió Santa Cruz de parte del Gobierno nacional durante los últimos 12 años de gestión Sin embargo, al asumir la gobernadora "blanqueó" que la provincia está quebrada.


Lamentable y preocupante es el el presente de la tierra "K" luego de haber sido la segunda provincia más beneficiada entre 2003 y 2014 por parte de Nación, obteniendo mucho más de lo que le hubiera correspondido, si se aplicaba como corresponde la Ley de Coparticipación Federal.


Sólo por detrás de Buenos Aires, Santa Cruz no paró de recibir fondos que hoy no se ven por ningún lado. No se ven en obras y tampoco en un estado financiero que le permita a la provincia tener autonomía para evitar la continuidad de los pedios de fondos a Nación, tal como hoy lo ruega Alicia Kirchner.


Sin embargo, tan triste como el pasado reciente (que involucra al ex gobernador, Daniel Peralta), es el presente que tiene a la gobernadora ocultando los números de la provincia ante el pedido de la oposición y los habitantes de toda la provincia, quienes quieren saber los motivos que la "obligan" a pedi 600 millones de pesos a Nación sólo este mes.


Sin embargo, los números se ocultan y los diputados oficialistas vuelven a oficiar de "peones" o "soldaditos" políticos que se encargan de obedecer órdenes del Ejecutivo, en este caso faltando a una sesión extraordinaria para no dar Quorum y así evitar dar detalles de la situación financiera de la provincia.


Tan trastocado está todo en Santa Cruz, que eso pasó como si nada. Pasó como los días pasan sin conocer detalladamente el estado de una provincia rica en recursos y pobre en capacidad para explotarlos. Una provincia pobre en capacidad de gestión, pero rica en cantidad de políticos preocupados sólo por su bienestar, con incontables sospechas por corrupción que nunca por confirmarse legalmente.


Y así está hoy Santa Cruz, ocultando sus números, rogando por fondos de Nación y sumando problemas sin solución a poco de comenzar las paritarias que prometen terminar de completarle el panorama a una gobernadora acorralada en menos tiempo del esperado, sin plan "B", "C" ni "D" que no sea recibir ayuda económica. Sin ideas pese a saber, desde la época de campaña, que esto podía pasar. (El Diario Nuevo Día)